Relajandome un poco (Libre)

Despues de haber corrido por casi toda la Academia, Eiko entro a los establos...donde se acerco y acaricio a los hermosos equinos que alli estaban.

- Hola pequeños...como estas? - les dijo a los caballos, los cuales solo lamieron su mano - veo que ustedes estan bien, pero....yo....- hizo una pausa larga - yo me siento triste, sin fuerza alguna. Ademas los estudiantes hombres, de la clase diurna siempre me persiguen....es muy agotador.

La chica se dejo caer al suelo, puso una de sus manos en su cabeza y las paso a su rostro, se sentia desesperada.

- hace mucho tiempo que no bebo sangre, quiero beber sangre - despues de decir esto rapidamente sacudio su cabeza - pero que estoy diciendo? no puedo beber sangre aqui en la academia - dio un gran suspiro - pero me siento agotada

OFF: Espero que no te moleste que responda Eiko.

Ese día realmente deseaba estar sola. El director me había mandado llamar y había sido una entrevista tan deprimente... no pensé en otra cosa que buscar algo que pudiera entretenerme y olvidar lo ocurrido. Entre una cosa y otra y errando por la Academia, mis pasos acabaron por llevarme al Establo. Sonreí al percatarme que en ese lugar podría estar cómodamente solitaria, sin más compañía que los caballos y ni tarda ni perezosa abrí la puerta para entrar.
Para mi sorpresa y casi desilusión, el lugar ya había sido ocupado. Una señorita no mucho más grande que yo y evidentemente también vampira, estaba ahí, conviviendo con aquellos hermosos animales.
Alcancé a oír la última parte de su conversación con ellos:
- Hace mucho tiempo que no bebo sangre, quiero beber sangre...pero ¿que estoy diciendo? no puedo beber sangre aqui en la academia... pero me siento agotada
No me sorprendió extraordinariamente la declaración. Para los que acababan de llegar, lo peor de habituarse a un lugar como éste era la abstinencia. Beber el líquido que nos mantenía fuertes y en forma era más que una tentación y no hacerlo nos provocaba demasiados contratiempos y malestares. Sintiendo toda la simpatía que otra vampiresa puede sentir por otra, respondí a sus palabras, como un impulso:
- Buenas noches. No pude evitar oírte... Lo cierto es que tienes razón. ¿Deseas una pastilla? - ofrecí amablemente, buscando entre mi ropa el pastillero que siempre me ocupaba de portar.

Sus ojos azules, un poco agotados, con la vista nublada miraron a la chica que estaba cerca detallademente para identificar quien era....para su sorpresa dijo en voz baja.

- Yuuki-san?...eres tu? - pregunto sin aliento - Yuuki-san?

La chica trataba de ponerse en pie, pero era inutil su cuerpo era debil.

Aun confundida y debil, tomo las patillas y se las trago con dificultad...al poco tiempo comenzo a sentirse mejor, sus ojos ya no estaban nublados.

- Muchas gracias - le dijo a aquella chica que la ayudo

Gracias a las pastillas que solo toman los estudiantes de la clase nocturna...por el efecto que surgen en los vampiros...sus fuerzas regresaban a su cuerpo, las suficientes para distinguir quien era humano o vampiro

- Quien eres?...tu no eres Yuuki-san - despues de decir esto se tomo otra pastilla - como odio el sabor de estas cosas...pero al menos me controlan - termino diciendo en voz baja

Cuando termino de ingerir casi todas las pastillas, ya se sentia mejor y parte de ella volvio, haciendo se notar.

- Mucho gusto - mostro una gran sonrisa - Yo soy Eiko Ikasuke.

Con un poco de dificultad y ayuda de sus manos se paro derecha, extendio su mano entregandole las pastillas que no habia consumido.

- Toma y muchas gracias de nuevo - Dijo con amabilidad -que bueno que estabas cerca o sino hubiera podido morir aqui o mucho peor....haber atacado a algun estudiante, me siento tan a avergonzada

- Parece que Juri-san es una sangre pura - Dijo en sus adentros, pero sus pensamientos fueron interrumpidos por un equino que con su hocico registraba todo su cuerpo - OYE!!!....ESPERA!!!

Rapidamente se aparto del caballo y de uno de los bolsillos de su falda saco una hermosa, jugosa y roja manzana.

- Ten travieso - puso la manzana frente a su hocico y este con sus dientes la agarro y comio - a la proxima no vuelva a hacer esto - le dijo al caballo mientras lo acariciaba, pero los otros caballos comenzaron a relinchar pidiendo manzanas para ellos - Vamos chicos tranquilos!!!

Eiko comienza a mirar a todas partes deseperada.

- Juri-san ayudame!!! - le dijo mirandola al rostro

Al escuchar el comentario de Juri-san, agacha la cabeza y comienza a tocar sus dedos indices entre ellos sintiendose arrepentida.

- Tienes razon - suspira - y gracias - le sonrie muy amablemente.

Eiko vuelve a acercarse a los caballos y los acaricia, ella no podia evitar estar cerca de los animales para acariciarlos, hablarles y darles de comer.

- los caballos son criaturas muy hermosas, elegantes y fuertes - dijo sin mirar a Juri-san al rostro - yo creo que en esto los caballos y los vampiros nos parecemos, tu que piensas Juri-san?